Pantera trae a una maja desnuda y tres de látex

El látex (en plural látices) es el jugo propio de muchos vegetales. Es de composición muy compleja y de él se obtienen sustancias diversas como el caucho, la gutapercha y la espuma de látex (para colchones, asientos, acolchados, etc.). El látex de ciertas plantas es venenoso, como el del manzanillo; el de otras es muy acre, como el de la higuera común; el del arbol de leche es dulce y se utiliza como alimento. El látex común proviene de la savia lechosa del árbol de caucho, “Hevea Brasillensis”, originario de los bosques tropicales de Sudamérica. El látex se recoge en cubos mediante cortes inofensivos en la corteza del árbol. Su empleo en globos y otros productos, hace de los árboles una valiosa inversión y proporciona un sustancial ingreso a los países productores, y su cultivo permite la conservación de las formas principales de vegetación en selvas tropicales, cruciales para el mantenimiento del frágil equilibrio ecológico de la tierra. El látex, para ser utilizado de manera casera, requiere de moldes de yeso que se rellenan de capas sucesivas; como catalizador se utiliza el alginato, que mezclado con el agua crea un catalizador que acelera el secado del látex, pues este por sí mismo puede durar días en secarse. El látex ha sido un material clásicamente utilizado en prótesis de caracterización y maquillaje. Asimismo, el látex se usa para la fabricación de condones y chupetes de niños.

Cualquiera que sea estrecho de mente puede pensar que el látex no es sino la manera de vestir de un putón verbenero. Ese no es nuestro problema. Ir de látex es otra cosa y las damas que lo han llevado puesto alguna vez saben a lo que me refiero. El látex hace lucir a esa mujer con clase, con estilo y glamourosa porque el látex define muy bien la figura, la ajusta, se amolda y marca una silueta de escándalo desde un vestido palabra de honor, marcando prieto, a un modelito con falda al viento luciendo piernas. Todos ellos vestidos sexy que hacen sentir bien a la dama que se siente segura de si misma. Y porque tu lo vales.

Aunque Goya no conociera el látex, es muy probable que le hubiese gustado...de hecho el latex es muy revelador de las formas que esconde, o revela, según los casos. Goya pintó primero la Maja Desnuda para luego vestirla en un juego perverso, previsiblemente inventado por Godoy. Pero ya se ha dicho que la maja vestida es mucho más sugestiva e inquietante que la Maja Desnuda, que no deja de ser un desnudo primario e ingenuo...un desnudo de comic underground, que podría decirse en nuestros días. Por eso es muy feliz la coincidencia en buscar un desnudo exquisito, como el que propone el fotógrafo Michael Papendieck y estas majas vestidas-desnudas de látex que nos propone Pantera.